Visitando por vez primera los estudios de MV el seminarista Jaime Flores, devoto a la Virgen María, nos habla, junto con la anfitriona: Gaby Hernández de Alujas, sobre la relación estrecha entre El Espíritu Santo y la Inmaculada, una relación tan íntima que uno no puede existir sin el otro, partiendo siempre de la explicación del mismo dogma declarado en 1854 por el Papa Pio Nono.
«El dogma de la Inmaculada Concepción no era importante para María, Ella ya era digna, sino más bien es para nosotros, para la fe de los cristianos» Jaime Flores.
La Inmaculada Concepción de María y su Divina Preparación
🙏 El orador enfatiza la importancia de hablar y nunca dejar de hablar de María, destacando su significado en su fe.
🌟La inmaculada concepción de María se basa en la idea de que nació sin pecado original, personificando un estado de gracia y perfección que se perdió después de Adán y Eva.
🌟 María fue preparada desde pequeña para tener un contacto directo con Dios, don que muchos desearían.
🙏 «La Inmaculada Concepción fue un gesto de absoluta gratuidad por parte del padre.»
🌟 “La inmaculada concepción de María no fue una reparación, sino algo que Dios pensó desde toda la eternidad y tuvo que prepararla de manera espléndida para ser madre de Jesús y ahora madre nuestra.”
🌟 «Dios quiso hacer de ella la madre de su hijo. No, ya la tenía en mente.»
El papel de María en la difusión del mensaje de Jesús
🙏 Vivir de las gracias del Espíritu Santo es clave para decir sí a la invitación de Dios.
💡 El paralelo entre el Espíritu Santo que nos permite hablar por Jesús y el coraje de María para decir sí resalta la importancia de ambos en la difusión del mensaje de Jesús.
🙏 La Madre María, siendo completamente santa, es capaz de darnos valor, esfuerzo y virtud, al interceder por nosotros día y noche ante Jesús y el Padre.
18/12/14