En esta conferencia, el Padre Ignacio Larrañaga explora la virtud del Abandono. No se trata de una resignación pasiva. Por el contrario, es un acto dinámico y liberador. Es la clave para encontrar la paz en medio de las dificultades.
Discernir: Luchar o Abandonar
El primer paso del abandono es una pregunta. ¿Esta situación que me duele puede cambiarse? Si la respuesta es sí, no es hora de abandonar. Es el momento de luchar con todas las fuerzas. Debemos hacer todo lo posible por cambiar la realidad.
Sin embargo, muchas veces la respuesta es no. Hay hechos consumados que no podemos alterar. Nuestro pasado, nuestro temperamento o las acciones de otros. En estos casos, resistirse es una locura.
La Locura de Resistir lo Inalterable
Cuando nos resistimos a lo que no tiene remedio, creamos nuestro propio sufrimiento. Revivimos el dolor del pasado en el presente. Nos damos de cabeza contra un muro que no se moverá. A esta tortura auto-infligida, el Padre Larrañaga la llama «locura».
El Acto Liberador: Dejarlo en Manos del Padre
La solución a lo que no tiene solución es sabia y sencilla. Consiste en dejarlo en las manos de Dios. Es un acto de fe y confianza. Al soltar la carga y silenciar la mente, el corazón encuentra la paz. El dolor se transforma en una ofrenda de amor. Así, nos liberamos de la amargura y podemos vivir.
30/11/13


1 Comment