En esta Apertura de un profundo retiro espiritual, el renombrado Padre Ignacio Larrañaga nos invita a transformar nuestra vida. Este «Especial Luz Católica» se centra en la urgente necesidad de ir más allá de «hablar de Dios» para aprender a «hablar con Dios», cultivando una relación personal y profunda.
El Camino Hacia la Paz Interior
El Padre Larrañaga aborda la «dispersa mental» de la sociedad moderna, esa fragmentación que nos impide ser «señores de nosotros mismos». La propuesta es clara: silenciar los clamores interiores y exteriores para permitir que Dios unifique y cohésione nuestro ser. Solo así se logra la estabilidad emocional, la fortaleza psíquica y la «gloriosa libertad de los hijos de Dios».
De Profesores a Profetas
El objetivo primordial no es acumular conocimientos sobre religión, sino vivir una experiencia personal de Dios. El Padre Larrañaga distingue entre un «profesor de religión» (que viene de las aulas) y un «profeta de Dios» (que viene del desierto, del trato cara a cara con el Señor). La Iglesia de hoy necesita profetas que, con su vida, hagan «visible al invisible» y «sonoro al silencio» de Dios.
Una Experiencia Incomunicable y Transformadora
La charla enfatiza que la experiencia de Dios es incomunicable; es como aprender a nadar: se experimenta personalmente o no se conoce. Solo lanzándose «de cabeza en el mar de Dios» se alcanza esa «sabiduría con sabor». Esta vivencia busca convertirnos en «criaturas fuertes, libres y alegres», liberadas de angustias y temores, y en «testigos de Jesucristo en medio del mundo».
Generosidad, Paciencia y Silencio
Para lograr esta transformación, el Padre Larrañaga pide generosidad, paciencia y, sobre todo, silencio interior. Un silencio «poblado de presencia» divina, un «diálogo interior de dentro a dentro con el Señor, Dios vivo y verdadero». Es una invitación a un «segundo nacimiento» donde el pasado queda borrado y se abren «horizontes de luz».
23/12/12

