«Aunque la fe llega a ser un misterio el hombre no está cerrado a entenderla completamente, y más como virtud sobrenatural, la fe se tiene que vivir, compartir, entender y vivir». El Padre Santiago Martínez nos habla sobre cómo es que la fe se puede entender como una virtud, y no cualquier tipo de virtud, sino como una del tipo sobrenatural, con base en la doctrina católica, el magisterio de la Iglesia Católica y en muchos escritos de los padres de la iglesia, como San Agustín y Santo Tomas de Aquino, como lo es la «Suma Teológica».
El Padre Santiago no pretende hacer una exposición completa del tema sí deja en claro los elementos que dentro de la Ciencia y la Sabiduría apoyan un conocimiento que viene de Dios y que por tanto es sobrenatural. Y este hecho se da en todo hombre independientemente de sus circunstancias particulares. A la vez, deja en claro los tipos de fe, empezando como la natural y después, la sobrenatural, como un acto ayudado por la gracia donde la inteligencia y la voluntad se sueldan en un asentimiento alegre y soberanamente libre a lo que Dios enseña para nuestra salvación.
«Debemos creer lo que Dios nos enseña, porque no puede engañarse ni engañarnos. Es razonable creer porque es cierto históricamente el hecho de la Revelación, y se encuentra confirmado con milagros y con profecías. Es razonable creer por lo tanto porque es históricamente cierto la divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, la historicidad de nuestra madre la Iglesia. Hay que creer porque no choca contra la razón» Tomando en cuenta siempre que el contenido de la fe son los misterios, y aunque éstos no se pueden entener al 100% sí que nuestro raciocinio comprende lo esencial y lo trascendente de cada uno de ellos.
9/12/12