En la conclusión de la serie «La gran misión del laico hoy Parte 4», se aborda la meta final. El programa «Entre el Mito y la Doctrina» explora la vocación universal a la santidad. Este llamado no es solo para sacerdotes o religiosos. Es para todos los bautizados.
¿Qué es la Santidad para el Laico?
Ser santo no significa no tener defectos. Es un proceso de toda la vida. Consiste en construir día a día la virtud. Es dejar que Cristo se refleje en nosotros. La santidad del laico se forja en el mundo. Se vive en las realidades temporales. En el trabajo, en la familia y en la sociedad.
Herramientas para el Camino a la Santidad
El camino a la santidad tiene ayudas concretas.
- La Caridad: Es el ejercicio principal. Significa amar al otro como necesita ser amado. Es un encuentro marcado por la misericordia.
- La Formación: Es una obligación moral. Una fe emocional necesita ser formada. La inteligencia debe ser evangelizada. Para esto, la Sagrada Escritura es fundamental.
- La Oración: La formación sin oración causa perdición. La vida de oración es indispensable. La Eucaristía es el lugar privilegiado de encuentro.
La gran misión del laico culmina en esto. En ser reflejo del amor de Cristo en el mundo.
10/02/19

