El Padre Daniel Jiménez, vicario judicial del Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis se Guadalajara, examina objetivamente la pregunta ¿Mi matrimonio fue válido?
Se define el matrimonio como un sacramento indisoluble entre hombre y mujer con propósito procreador; sin embargo, enfatiza usar inteligencia, voluntad y libertad al decidir.
Presenta cuatro pasos: atracción, conocimiento, enamoramiento y decisión consciente, porque cada etapa es vital para garantizar un consentimiento informado y sincero.
Se advierte que el consentimiento puede viciarse por impotencia o vínculos previos, a causa de lo cual podría declararse inválido si no se comprendió su significado pleno.
Puntos más relevantes:
- El matrimonio es un sacramento indisoluble con fin procreador.
- Los cuatro pasos necesarios: atracción, conocimiento, enamoramiento y decisión consciente.
- El consentimiento informado requiere inteligencia, voluntad y libertad.
- Impotencia y vínculos previos pueden viciar el consentimiento.
- Reflexión profunda para discernir la validez matrimonial.
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R.: ¿? // T.O.: ¿? // Rt.: 27/04/13
